¿Sabías que puedes decidir si quieres estar en pareja, crear una familia o simplemente ser soltero/a de por vida?
Hace unos años estuve en un seminario de Semiología de la Vida Cotidiana donde el Dr. Alfonso Ruiz Soto dijo que la vocación es ese llamado interno y es lo que da la realización personal. Y después explicó que vocación reclama relación.
En ese momento no me había quedado claro lo que quiso decir, pero conforme fui estudiando mi propia vida me di cuenta de que mis deseos de tener una familia y la obsesión de casarme antes de cumplir los 30 años tenía más que ver con lo que mi familia y sociedad exigía que lo que realmente yo quería.
Así pues, decidí echarme un clavado en los tres tipos básicos de relaciones interpersonales: Soltería, Pareja y Familia. Y con esa información decidir en conciencia lo que realmente me iba a hacer sentir realizada, plena, feliz y con sentido de vivir. Para ello, tuve que entender lo que implica cada tipo y las responsabilidades que conllevan.
Antes de compartir contigo mi entendimiento al respecto, es importante poner sobre la mesa algunas consideraciones antes de entrar en una relación afectiva. Si yo hubiese sabido esto antes me habría ahorrado mucho sufrimiento.
- Vocación reclama relación: un ejemplo que me dejó muy clara ésta afirmación fue la película Misión imposible. Ethan es un espía que busca proteger a la humanidad de terroristas y personas malas y Julia es una doctora que quiere sanar a los enfermos. Ellos se aman y buscan el bienestar de la humanidad, pero uno se arriesga y genera enemigos que pone en peligro la vida de él y la de su pareja, y ella está en el hospital la mayor parte de su tiempo. Al final, por la seguridad de ella deciden separarse. Si la pareja no compagina su profesión, es muy difícil que puedan hacer que funcione la relación. Por qué cada quién tiene intereses diferentes. Mientras Ethan pasa temporadas fuera, ella está en el hospital salvando vidas. No hay intimidad. (en la última Misión imposible: Repercusión vean que pasa con esta pareja)
- Comprométete con alguien que se puede comprometer: eso quiere decir, que si sabes que esa persona que llama tu atención tiene comportamiento de eterno adolescente, debes pensar bien lo que implica cargar con un lastre como ese y decidir en completa conciencia si eso es lo que deseas en tu vida. Una característica del adolescente es que no se puede comprometer porque no asume la responsabilidad de nada, ni de él mismo
- Quieres conocer a alguien, vive con ella un mes. Todos somos diferentes por nuestra educación y personalidad, por eso es importante que antes de tomar la decisión de para toda la vida sepas en que te estás metiendo, vive con esa persona e identifica si sus manías y hábitos encajan con los tuyos
Con esto aclarado, entremos en materia:
Soltería
La soltería implica que tienes un proyecto de vida individual, es decir, que todo lo que decides hacer lo haces para ti y por ti. Además, te haces cargo de ti mismo/a. Pagas tus cuentas, vives solo/a, te das de comer y te atiendes.
Esta etapa se confunde mucho cuando aún vivimos en casa de nuestros padres, en ese momento si estamos solteros pero realmente somos hijos, porque aún no nos hacemos cargo de nosotros mismos.
La soltería implica hacerte responsable de ti y tomar decisiones por ti y para ti.
Existen dos tipos de solterías:
- De relaciones múltiples simultáneas: Es el tipo de soltería donde la persona decide estar involucrada sexualmente con varias personas sin compromiso. Mantiene su individualidad viviendo en su propio espacio solo o sola. Para esta persona, estar con otra se produce solo cuando tienen ganas los dos y no espera ni exige nada, más que el placer de estar en el momento
- De una persona: en este tipo de soltería cada quién vive en su espacio, pero existe exclusividad entre ellos, no salen ni tienen relaciones con nadie más, pero no tienen un compromiso. Están juntos solo cuando les apetece.
Lo importante en ambos tipos de soltería es que la persona que tiene esta vocación lo tenga muy claro y lo diga desde el principio a todos los involucrados. Todos podemos hacer lo que queramos pero la regla de oro de la vida es nunca te hagas daño a ti y nunca le hagas daño a nadie.
Podrías ser una persona con vocación de soltería si:
- No quieres un establecer un vínculo a largo plazo con otra persona
- No te interesa un compromiso formal con otra persona
- No quieres cambiar tu estilo de vida
- Prefieres estar de vez en cuando con la persona y no quieres ningún tipo de atadura
- Tu vida gira entorno a tus propias necesidades y proyectos
- Te consideras libre y por ende con la libertad de decidir sin lo que harás en un determinado momento y no lo consultas con nadie
- No te gusta dar explicaciones y no las exiges
Si descubres que tu vocación es de soltería y sales con una persona es importante que le expliques tu vocación y que ambos estén de acuerdo en la forma en que se desarrollará la relación. Si uno de los dos no está de acuerdo no se debe continuar con la relación. Esto puede evitar muchos malos entendidos y malos ratos.
Nota: Si te descubres en vocación de soltería asume tu vocación y ponla en práctica lo antes posible.
Pareja
La pareja implica tener un proyecto de vida en común entre dos personas. Ambos tienen obligaciones y derechos y son responsables de dar el 100% de si mismos para que la relación prospere. Los dos acuerdan cómo se encargarán del hogar, deberán colaborar entre sí y convertirse en el apoyo incondicional mutuo.
Un proyecto de vida en común implica una visión compartida de la vida que incluye valores, deseos y anhelos. La pareja ideal es aquella en donde puede existir apertura, profundidad y pasión. En la pareja y en general se debe compartir solo aquello que enriquece, no aquello que lastima.
La pareja implica un compromiso con otra persona y las decisiones se toman en conjunto. Ambos están al mismo nivel por eso se llama pareja. No se debe perder la individualidad, porque cada quién es un ser único e irrepetible, pero sus proyectos de vida deben coincidir, además de que la vocación laboral debe estar alineada.
Podrías ser una persona con vocación de pareja si:
- Te gusta negociar y conciliar
- Te interesa un compromiso a largo plazo con una persona
- Disfrutas mucho de estar en compañía de alguien
- Te gusta compartir tus espacios y tiempo
- Puedes hacer planes con otra persona y llegar a puntos de acuerdo donde ambas partes se sientan satisfechos
- No quieres tener hijos pero si quieres estar en pareja
- Eres tolerante y puedes dar lo mejor de tu ser a la otra persona
- Debe existir apertura de la intimidad y ambos deben desear compartir su ser
En una pareja debe existir comunicación efectiva, empatía y una visión de la vida y del mundo en común. Nunca debería existir aburrimiento, ya que cada uno es un universo único y extraordinario que se puede explorar durante el tiempo que compartan. En la pareja debe existir entrega, pasión y romance.
Nota: Si te descubres en vocación de pareja asume tu vocación y ponla en práctica. Y aclara bien tu deseo de no tener hijos con la persona que decidas empezar una relación de pareja, ya que esto puede ser un rompe tratos (deal breaker) siempre se claro. En pareja se hace nuestra vida, manteniendo siempre la individualidad.
Familia
Tener vocación de familia implica agregar a la pareja hijos. Ambas partes deben tener vocación de paternidad y maternidad.
Este tipo de relación es fundamental para el desarrollo sano de los seres humanos, ya que un hijo deseado y planeado por la pareja impacta directamente en la seguridad y autoestima del individuo que llega a la vida.
Podrías ser una persona con vocación de familia si:
- Puedes entregar el 1000% de tu ser a tus hijos
- Puedes ser paciente y tolerante con tus hijos
- Comprendes que los niños necesitan atención, atención y más atención
- Comprendes que los niños necesitan jugar y tu debes jugar con ellos
- Comprendes y estas dispuesto a dar todo tu amor y tiempo a tus hijos
- Comprendes que ser padre es para toda la vida y no se puede poner en pausa
- Sabes que los hijos se tienen que atender
- Sabes que tu trabajo te tiene que dar tiempo de estar con tus hijos
Formar una familia requiere madurez e inteligencia emocional, entrega, compromiso y vocación, por ende ambas partes de la pareja tienen que estar de acuerdo en formar la familia.
Nota: Al formar una familia tu vida pasa a segundo plano, eso quiere decir que primero está el bienestar de tus hijos, pero OJO nunca se debe descuidar a la pareja, por lo tanto, la pareja tiene que aprender a manejar su tiempo y organizarse para poder mantener la pasión y la complicidad viva. Si te descubres en vocación de familia asúmela en completa paz.
En caso de que tengas familia pero te das cuenta de que no tienes vocación, felicitate por darte cuenta, pero ahora tendrás que asumir tu paternidad/maternidad con todo lo que implica y tendrás que aprender a implementar todo lo que se requiere para ser un padre maravilloso. Porque en este caso no se aceptan devoluciones.
Sin importar cual sea tu vocación siempre se muy claro con los demás involucrados, porque existe una falsa creencia de que se puede persuadir a las personas a cambiar su vocación. Si la persona tiene la identidad débil es probable que sea persuadida, pero la realidad es que si su vocación es de soltería y se mete en una relación será muy infeliz y la otra persona también y se empeora todo cuando deciden tener hijos. Esta es una de las causas por la cual se genera la infidelidad.
Mi consejo para ti que estás leyendo este post es que vivas con entusiasmo la vida que decidas vivir y que seas congruente y coherente entre lo que dices, haces y realmente quieres, tu vida es tuya y nadie puede vivirla por ti.
Hasta la próxima
Jany
Excelente lectura, me hizo reflexionar acerca de tantas cosas, el flujo natural en la relación con otra persona, y dejar claro los puntos de convivencia, de manera de avanzar juntos hacia la misma meta. hay algo que también hay que tener en cuenta y pienso que son las circunstancias, es una variable que pudiera en algún momento afectar el estado en el cual te planteas vivir, tanto tuyo como de tu pareja y eso pudiera generar cambios en la relación, pienso que esos son los retos a superar. Gracias!
😉
Precisamente de eso se trata Rafa, en pareja tienes que trabajar en equipo para decidir lo que es mejor para los dos considerando las circunstancias, el proyecto de vida individual y el de la pareja